28 de noviembre de 2013

CIBERACOSO: EL LADO OSCURO DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS

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Casi un 70 % de las jóvenes aseguran haber recibido mensajes con insultos. Y cerca del 40 % ha recibido alguno que les ha hecho «sentir miedo»


Si todos tenemos de bueno lo que nos falta de malo, con las nuevas tecnologías ocurre lo mismo. Su expansión ha revolucionado el mundo de la comunicación y de las relaciones, especialmente entre los llamados nativos digitales; esa generación que nació inmersa en ellas y ha ido evolucionando a la par que las nuevas aplicaciones digitales. Quizá por eso, son esos mismos jóvenes, los que con más soltura se desenvuelven en la sociedad digital son los que tienen una percepción sorprendentemente baja de los riesgos que pueden esconderse tras ellas. Son los que menos ven el lado oscuro que pueden esconder las nuevas tecnologías. Así lo revela el estudio de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género «El ciberacoso como forma de ejercer la violencia de género en la juventud: un riesgo en la sociedad de la información y del conocimiento», elaborado por Cristóbal Torres, catedrático de Sociología de la Universidad Autónoma de Madrid, en el que se observa cómo el 28,1% de los adolescentes no consideran conducta de riesgo responder a un mensaje en el que son insultados, que uno de cada cuatro asegure sin reparos que colgaría una fotografía suya que sus padres no autorizarían o que el 44,5 % de los chicos y el 37,1 % de las chicas han aceptado dos o más veces como amigo o amigaen la red a una persona desconocida.

Redes sociales y móviles

Whatsapp, Tuenti y las llamadas al móvil son los medios más frecuentes para enviar y recibir mensajes insultantes o amenazantes, como forma de ejercer la violencia de género, y son las mujeres los principales receptoras de esta nueva violencia. No en vano, hasta el67,1 % de las jóvenes dice haber sido víctima de violencia de género a través de las nuevas tecnologías hasta a través de mensajes con insultos. Y el 36% ha recibido algún mensaje que les ha hecho «sentir miedo», o algo casi peor, puesto que el 14,7% de las chicas que han sufrido esta violencia asegura haber recibido algún mensaje para presionarlasa participar en actividades de tipo sexual y un 16,6% dice que han visto difundidas imágenes suyas comprometidas o de carácter sexual sin su consentimiento.
El estudio sobre el ciberacoso revela igualmente otras conductas de riesgo en ambos sexos: el 25% de las adolescentes y el 36% de los chicos no consideran muy o bastante peligroso responder a un mensaje en el que alguien que no conoce les ofrece cosas. Además, el 5% de las chicas y el 16% de los chicos no creen peligroso colgar una foto suya de carácter sexual, como de hecho reconocen haber hecho en alguna ocasión el 1,1% de las jóvenes y el 2,2% de los chicos.
La juventud y la adolescencia son cruciales en el desarrollo de la personalidad de cualquier ser humano, y por ello, recordó ayer la ministra de Sanidad, Ana Mato, «actuar en esta etapa es fundamental». Y para acabar con este tipo de violencia, la ministra ha anunciado que a las medidas penales, como la tipificación del acoso como delito, con agravante en caso de que el autor sea cónyuge o ex cónyuge, se sumarán las medidas de formación, como el fomento de la igualdad efectiva en todas las etapas educativas, o el Plan de Convivencia y Mejora de la Seguridad Escolar, que se reforzará en 2014 con la inclusión de otras formas de violencia contra la mujer. Para que padres y profesores vean reforzada su labor educativa, se les proporcionarán herramientas como la Red de Buenas Prácticas 2.0 o elProyecto Plurales.

25 de noviembre de 2013

¿QUÉ PREOCUPA A LOS JÓVENES?

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Las expectativas vitales de la juventud 

Para conocer cuál es la situación de los jóvenes españoles y sus principales preocupaciones, la Fundación Pfizer ha llevado a cabo el estudio sociológico ‘Estudio de opiniones, actitudes y expectativas vitales de la juventud española’.

En esta encuesta, que ha comprendido un total de 1.412 entrevistas realizadas a jóvenes de entre 15 y 32 años, se refleja que la mayoría de los jóvenes españoles en términos generales están satisfechos con su vida. Sin embargo, éstos piensan que cada vez se les exige más y que se tienen menos en cuenta sus opiniones.

Tanto a nivel personal como profesional, el principal problema del conjunto de la juventud española es el paro. En el plano profesional le siguen los estudios y la educación (para el 28,1%), la calidad del empleo (el 10%), los problemas económicos (9%) y la falta de expectativas de futuro (7,7%). A nivel personal, el paro es seguido de los problemas económicos (el 26,1%), los estudios (el 19,3%), la calidad de empleo (el 12,1%) y la vivienda (el 6,2%).
 
Respecto a su situación económica actual, cerca de la mitad de los jóvenes, concretamente un 49%, opina que no es ni buena ni mala y, aproximadamente un tercio de ellos, el 27%, cree que es mala. Cabe destacar que el 57% de los encuestados piensa que dentro de 2 ó 3 años su situación económica no será satisfactoria.

Tan sólo el 20% de los jóvenes españoles se ha independizado, a pesar de que a partir de los 27 años a todos les gustaría haberse emancipado de casa de sus padres. En este sentido, un 86% de los padres financia a sus hijos.

Estudios y acceso al mercado laboral


Prácticamente todos los encuestados, el 94%, cree que merece la pena estudiar y formarse para obtener un trabajo. Sin embargo, en el plano educativo existen numerosas contradicciones, ya que el 60% opina que la educación recibida no es la adecuada para las necesidades del mercado laboral. Además, aunque uno de cada cuatro jóvenes de entre 15 y 17 años no está satisfecho con la educación recibida, el 86% empezará bachillerato para poder acceder a la universidad, una decisión influenciada fundamentalmente por los padres. 
 
Por su parte, los jóvenes de 23 a 26 años también tienen dudas sobre sus estudios o las expectativas de trabajo. De hecho, aunque el 82% está bastante satisfecho con la carrera cursada, el 24% opina que sus estudios no le serán de utilidad a corto/medio plazo y más de la mitad, el 56%, cree que no encontrará un trabajo al finalizar su carrera. A pesar de ello, el 57% seguirá estudiando para ampliar la formación y, de ese modo, poder tener más opciones para acceder al mercado laboral. Asimismo, la mayoría de ellos, el 72,6% ve más fácil encontrar trabajo en el extranjero. 
Por último, es destacable que el 42% de los jóvenes de entre 30 y 32 años hoy elegiría otra carrera diferente a la que cursó y que tan sólo la mitad de ellos, el 49%, trabaja en un ámbito relacionado con lo que ha estudiado. 

Expectativas profesionales


Referente al empleo, existe un dato alarmante, y es que cuatro de cada diez jóvenes con trabajo teme perder su empleo en los próximos doce meses. Además, la mitad de los que están parados no ven probable encontrarlo. 
 
Según ellos, para poder encontrar un trabajo en la actualidad lo fundamental es estar bien preparado y tener buenas recomendaciones. De los empleos, los más valorados son los seguros y estables, que además permitan desarrollar las propias capacidades y conciliar la vida personal con la familiar.

La crisis económica afecta de forma directa a un 61% de los jóvenes españoles y a un 63% de sus padres o familiares directos. Para los encuestados, la principal consecuencia de esa crisis es la dificultad para encontrar un trabajo. También consideran que ha influido en una bajada de los sueldos y, por consiguiente, en un menor poder adquisitivo.

Este estudio demuestra por tanto cómo la situación actual ha cambiado la forma de pensar de los jóvenes, que actualmente viven más preocupados por el dinero y el trabajo que en épocas anteriores.

Artículo publicado por Publicado por María García el 20/11/2013. http://www.enfemenino.com/vida-personal-profesional/que-preocupa-a-los-jovenes-d55072.html