30 de noviembre de 2009

Guía Injuve: Boletín 122


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INTRODUCCIÓN NÚMERO MONOGRÁFICO SOBRE GÉNERO: IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES Y MALOS TRATOS


Por primera vez editamos un número monográfico para empezar una nueva línea: dedicar una atención especial a la información sobre temas candentes de interés para los y las jóvenes. Y lo hacemos en el Día Internacional contra la Violenci a de Género", cuando, acaba de concluir el "Foro Internacional "Juventud y Violencia de Género" que ha reunido en Madrid los días 23 y 24 de noviembre en torno a mil jóvens de todas las partes del mundo y donde expertos y expertas en el tema , de fidiferente ámbitos culturale y sociales, han espuesto sus ideas, sus experiencias y han respondido a las preguntas de los y las asistentes.


En este contextos, hemos empezado por "Género" para ocuparnos de dos aspectos fundamentales para la vida y el desarrollo de la juventud, aunque transcienden a todos los grupos de edad de la sociedad: la igualdad entre hombre y mujeres y la violencia de género.
Son dos temas íntimamente relacionados. Los malos tratos contra las mujeres ha sido una constante a lo largo de la historia y desde la concepción patriarcal de la sociedad se ha considerado, erróneamente, como casos aislados o patológicos y no como un problema social de fondo. Y esto se debía, y por desgracia en algunas ocasiones se sigue debiendo, a la situación de sometimiento de la mujer con respecto al hombre, a su absoluta dependencia, empezando por la económica. La lucha por la igualdad ha llevado a la mujer a alcanzar un espacio propio en la sociedad, en la vida pública y en el trabajo. Sin embargo el sustrato patriarcal no ha desparecido completamente. El rol masculino se ha visto modificado y este cambio todavía esta siendo asimilado por los hombres. El no asumirlo es lo que contribuye a la violencia como resultado de un deseo de imposición, de sometimiento de la novia, mujer o compañera. Pero también es verdad que las cosas van cambiando, aunque sea lentamente, y las relaciones entre hombres y mujeres van por el camino de la comprensión mutua, la colaboración y la corresponsabilidad en los diversos ámbitos de la vida pública y privada.


Sin embargo no debemos bajar la guardia. Todavía hay repuestas de jóvenes cuando son encuestados sobre lo que esperan de su pareja o sobre las tareas domésticas o sobre otras concepciones sobre el sexo opuesto que nos muestran que el machismo no ha desaparecido. Las relaciones entre chicos y chicas a veces esconden una incipiente violencia o una forma de sometimiento o de control sobre la mujer que en un futuro puede derivar en malos tratos.

La mejor forma para acabar con las diferencias de género y todas sus consecuencias es la prevención y corrección de los comportamientos discriminatorios y violentos y esto se hace a través de la educación: en el colegio, en la familia, en la educación no formal, en los espacios de ocio. Niñas, niñas, adolescente y jóvenes deben ser educados y educadas, por sus padres, su profesorado, sus monitores del tiempo libre y por todas las personas que intervengan en su proceso formativo, en la tolerancia, en el respeto y en las responsabilidades compartidas entre sexos.


Es muy importante también la formación de los y las profesionales que se ocupan de los temas de la violencia y la discriminación. Tienen que recibir una buena preparación para poder actuar tanto en la prevención como en la reparación de los problemas de malos tratos, desde sus diferentes especialidades.


Esperamos contribuir un poco a la gran tarea que nos queda a todos y todas en la lucha por la igualdad y contra la violencia de género.

La publicación se estructura en los mismos apartados de siempre. Todas las informaciones y recursos ofrecidos son destacados, es decir, se les dedica una explicación más extendida. Ofrecemos cursos, premios, legislación y publicaciones-recursos web.

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